En el día de ayer, se coronó un proceso que se viene gestando desde hace meses.
Los delincuentes que operan desde la empresa Life Group, inicialmente protagonizaron incursiones en nuestro sitio www.elmartillojudicial.com.ar simulando comentarios desinteresados.Estos comentarios, a pesar de ser siempre de la misma fuente, se realizaba con nombres diferentes, con la evidente intención de inducir al lector desprevenido a una conclusión sin fundamento genuino.
También se produjeron llamados telefónicos capciosos o aún maliciosos con preguntas sobre supuestas actividades nuestras que son absolutamente ajenas.A esto agregaron llamadas que al ser contestadas eran cortadas.No tardaron en llegar las amenazas.
Se sumó a esto un cuestionamiento absurdo que era la no publicación en guía de dos de nuestras lineas telefónicas, sacando acto seguido concluiones de una supuesta clandestinidad inadmisible.
Todo el accionar estaba orientado a construir una imagen falaz, a raiz de nuestra publicación sobre esta pandilla.
No contentos con esto, en el día de ayer, los delincuentes, mudaron su accionar delictivo a Facebook, armando páginas en las que usurparon nuestro logo, agregandolé leyendas insultantes, y remitiendo a los amigos del sitio información falaz y degradante.Esto, siguiendo con el método subrepticio, no se llevó a cabo con su verdadera identidad, sino simulando una identidad falsa.
Concomitantemente, se recibieron sucesivos mensajes que fueron archivados y copiados a sostén, en los que se condicionaba el cese de la agresión a que se levantaran las notas sobre Life Group.
Esto planteaba claramente una antitesis indudable.
1)Nosotros actuamos con nombre y apellido y hasta publicamos dirección de correo y teléfonos, mientras ellos actuan desde el anonimato o usurpando identidades.
2)Nosotros respetamos la posibilidad de que los delincuentes publiquen sus expresiones en nuestro sitio sin que haya contraprestación alguna.
3)Nosotros no inventamos los comentarios de los profesionales que denuncian a Life Group como una organización delictiva, después de haber trabajado para ellos.
4)Life Group NO HA CONTRADICHO UNA SOLA DE LAS DENUNCIAS NI HA DEMOSTRADO JAMÁS SU FALSEDAD, limitandosé a tratar de agredirnos a nosotros.
5)Las imputaciones que nos enrostran, son manifestaciones falaces e ilegitimas del año 1996, que intimados sus emisores, se retratactaron fehacientement por carta ocumento.
6)Periodistas que oportunament no lo hicieron, haciendose eco de dichas manifestaciones falaces fueron querellados.
7)Si Life Group entiende que hemos vulnerado alguno de sus derechos, están habilitados para el correspondiente reproche judicial, cosa que jamás se emprendió, optando por la extorsión.
De manera tal, que con nuestra trayectoria militante y comprometida con los derechos civiles, nada tenemos que ocultar y nada que revisar.
Life Group, en su componentes muestra su verdadera condición, y la preocupación por su exposición publica de HECHOS DELICTIVOS QUE SI OCURRIERON.
No es un tema menor que esta banda actúe en tándem con la pandilla de MOROSOS INCOBRABLES, no solo en la operatoria, sino que se acompañan hasta en las profusas campañas publicitarias, engañosas y maliciosas, orientadas a captar incautos.
Caranchos cibernéticos, de un nuevo tiempo olvidable que en el día de la fecha, se judicializa.
Ahora, que ataquen la imagen del fiscal.
Señores, esto sigue.
Ahora es una cuestión de honor.
Los delincuentes que operan desde la empresa Life Group, inicialmente protagonizaron incursiones en nuestro sitio www.elmartillojudicial.com.ar simulando comentarios desinteresados.Estos comentarios, a pesar de ser siempre de la misma fuente, se realizaba con nombres diferentes, con la evidente intención de inducir al lector desprevenido a una conclusión sin fundamento genuino.
También se produjeron llamados telefónicos capciosos o aún maliciosos con preguntas sobre supuestas actividades nuestras que son absolutamente ajenas.A esto agregaron llamadas que al ser contestadas eran cortadas.No tardaron en llegar las amenazas.
Se sumó a esto un cuestionamiento absurdo que era la no publicación en guía de dos de nuestras lineas telefónicas, sacando acto seguido concluiones de una supuesta clandestinidad inadmisible.
Todo el accionar estaba orientado a construir una imagen falaz, a raiz de nuestra publicación sobre esta pandilla.
No contentos con esto, en el día de ayer, los delincuentes, mudaron su accionar delictivo a Facebook, armando páginas en las que usurparon nuestro logo, agregandolé leyendas insultantes, y remitiendo a los amigos del sitio información falaz y degradante.Esto, siguiendo con el método subrepticio, no se llevó a cabo con su verdadera identidad, sino simulando una identidad falsa.
Concomitantemente, se recibieron sucesivos mensajes que fueron archivados y copiados a sostén, en los que se condicionaba el cese de la agresión a que se levantaran las notas sobre Life Group.
Esto planteaba claramente una antitesis indudable.
1)Nosotros actuamos con nombre y apellido y hasta publicamos dirección de correo y teléfonos, mientras ellos actuan desde el anonimato o usurpando identidades.
2)Nosotros respetamos la posibilidad de que los delincuentes publiquen sus expresiones en nuestro sitio sin que haya contraprestación alguna.
3)Nosotros no inventamos los comentarios de los profesionales que denuncian a Life Group como una organización delictiva, después de haber trabajado para ellos.
4)Life Group NO HA CONTRADICHO UNA SOLA DE LAS DENUNCIAS NI HA DEMOSTRADO JAMÁS SU FALSEDAD, limitandosé a tratar de agredirnos a nosotros.
5)Las imputaciones que nos enrostran, son manifestaciones falaces e ilegitimas del año 1996, que intimados sus emisores, se retratactaron fehacientement por carta ocumento.
6)Periodistas que oportunament no lo hicieron, haciendose eco de dichas manifestaciones falaces fueron querellados.
7)Si Life Group entiende que hemos vulnerado alguno de sus derechos, están habilitados para el correspondiente reproche judicial, cosa que jamás se emprendió, optando por la extorsión.
De manera tal, que con nuestra trayectoria militante y comprometida con los derechos civiles, nada tenemos que ocultar y nada que revisar.
Life Group, en su componentes muestra su verdadera condición, y la preocupación por su exposición publica de HECHOS DELICTIVOS QUE SI OCURRIERON.
No es un tema menor que esta banda actúe en tándem con la pandilla de MOROSOS INCOBRABLES, no solo en la operatoria, sino que se acompañan hasta en las profusas campañas publicitarias, engañosas y maliciosas, orientadas a captar incautos.
Caranchos cibernéticos, de un nuevo tiempo olvidable que en el día de la fecha, se judicializa.
Ahora, que ataquen la imagen del fiscal.
Señores, esto sigue.
Ahora es una cuestión de honor.
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